¿Qué está ocurriendo con el resto del país?
Un día me despertaré y estaré en un terreno de algún extranjero...
En Internet, están vendiendo terrenos de áreas turísticas del interior como pan caliente, y han proliferado decenas de websites promoviéndolos... Todo esto en un pestañear...
¿Acaso el Estado hace algo al respecto en sentido de proteger nuestros intereses y no regalar nuestra tierra? ¡O que lo controlen al menos!
Hay sitios que hablan de lo hermoso de la tierra, de la tranquilidad, su flora, fauna y hermoso paisaje. Pero no solo promueven el lugar, te venden un pedazo de terreno a quién sabe qué precio. ¿Estará el gobierno obteniendo alguna ganancia de esto, de forma tal que nos beneficie a todos, especialmente quienes viven en esas áreas? ¿O quedaremos nuevamente sometidos a los extranjeros... todos disfrutando de esta tierra, sin beneficiar a los que llevamos años viviendo y tratando de mejor este sitio?
También hay otro centenar de websites de abogados, royalty developers y demás, que ofrecen servicios a personas vía Internet. Esta gente de dudosa procedencia ha aparecido online, ofreciendo beneficios a personas ingenuas que pueden tratar de utilizar sus servicios. Esto sería perjudicial para el nombre del país, especialmente ahora que está en auge pues quién sabe cuánta gente esté entrando al país a ofrecer servicios "brujos", aprovechándose de la situación en que muchas actividades no están reguladas por las leyes actuales.
Es de mi parecer opinar que en vez de estar luchando por quién roba más y por resaltar su nombre en noticieros y asambleas, los legisladores y similares se adelanten a aprobar leyes que protejan a la población antes que estas situaciones sucedan (tales como leyes que regulen o prohíban la pornografía, el abuso infantil, ventas de terrenos ilegales, y muchos otros temas que en otros países existen) y no se sobresalten aprendiendo del estado grave de su país mediante noticieros internacionales durante sus ostentosos desayunos o cenas. (Como sucedió con Madame Tonya, noticia que apareció en un reportaje realizado hace algunos años por Antena3 de España, investigación que causó asombro y revuelo a una sociedad que “aparentemente” desconocía dicha situación).
Un día me despertaré y estaré en un terreno de algún extranjero...
En Internet, están vendiendo terrenos de áreas turísticas del interior como pan caliente, y han proliferado decenas de websites promoviéndolos... Todo esto en un pestañear...
¿Acaso el Estado hace algo al respecto en sentido de proteger nuestros intereses y no regalar nuestra tierra? ¡O que lo controlen al menos!
Hay sitios que hablan de lo hermoso de la tierra, de la tranquilidad, su flora, fauna y hermoso paisaje. Pero no solo promueven el lugar, te venden un pedazo de terreno a quién sabe qué precio. ¿Estará el gobierno obteniendo alguna ganancia de esto, de forma tal que nos beneficie a todos, especialmente quienes viven en esas áreas? ¿O quedaremos nuevamente sometidos a los extranjeros... todos disfrutando de esta tierra, sin beneficiar a los que llevamos años viviendo y tratando de mejor este sitio?
También hay otro centenar de websites de abogados, royalty developers y demás, que ofrecen servicios a personas vía Internet. Esta gente de dudosa procedencia ha aparecido online, ofreciendo beneficios a personas ingenuas que pueden tratar de utilizar sus servicios. Esto sería perjudicial para el nombre del país, especialmente ahora que está en auge pues quién sabe cuánta gente esté entrando al país a ofrecer servicios "brujos", aprovechándose de la situación en que muchas actividades no están reguladas por las leyes actuales.
Es de mi parecer opinar que en vez de estar luchando por quién roba más y por resaltar su nombre en noticieros y asambleas, los legisladores y similares se adelanten a aprobar leyes que protejan a la población antes que estas situaciones sucedan (tales como leyes que regulen o prohíban la pornografía, el abuso infantil, ventas de terrenos ilegales, y muchos otros temas que en otros países existen) y no se sobresalten aprendiendo del estado grave de su país mediante noticieros internacionales durante sus ostentosos desayunos o cenas. (Como sucedió con Madame Tonya, noticia que apareció en un reportaje realizado hace algunos años por Antena3 de España, investigación que causó asombro y revuelo a una sociedad que “aparentemente” desconocía dicha situación).
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